¿Qué tienen en común la cueva de Altamira en España, el santuario de Machu Pichu en Perú y el paisaje cultural del Parque Nacional Tongariro en Nueva Zelanda? Estos tres lugares junto a otros casi mil sitios y expresiones culturales de todo el mundo componen en la actualidad un inventario largo y variado, la Lista del Patrimonio Mundial que desde hace 40 años elaboran los expertos de la UNESCO.
Es una lista de monumentos, ciudades históricas, paisajes culturales y paisajes naturales, de construcciones o expresiones culturales. En España han sido distinguidos desde 1984 como Patrimonio Mundial bienes culturales con “un valor universal excepcional”, edificios como la catedral de Burgos (1984), ciudades históricas como Toledo (1986), conjuntos históricos como la Alhambra, el Generalife y el Albaicín de Granada (1984), o conjuntos de sitios dispersos por el territorio como los lugares con arte rupestre del Arco Mediterráneo (2000). Es Patrimonio Mundial también una construcción de ingeniería como el Puente colgante de Vizcaya (2006) o una instalación minera como las Minas de Mercurio de Almadén en Ciudad Real (2012). Como patrimonio natural, es Patrimonio Mundial el Parque Nacional de Garajonay en la Isla de La Gomera (1986), que conserva vegetación como la de la Era Terciaria, ya desaparecida en otros lugares. Como patrimonio mixto, natural y cultural, es Patrimonio Mundial Ibiza (1999), reserva de la biosfera, por la interacción entre los ecosistemas marinos y costeros y su vinculación con la presencia humana en tiempos de los fenicios. Un total de 44 bienes de España integran hasta ahora la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Todos ellos son sitios únicos, irremplazables y auténticos. Son únicos como la Gran Pirámide de Kheops en Egipto, una construcción de características excepcionales que existe en un solo lugar del mundo. Son irremplazables como la selva de la cuenca del río Amazonas en Brasil, que si fuera destruida no existiría posibilidad de reconstruirla de manera idéntica. Son lugares auténticos porque se conservan tal y como fueron construidos o como eran en el momento de su formación, como la ciudad de Petra en Jordania.
La Lista del Patrimonio Mundial es una lista para la memoria y para la acción, es también una lista inacabada, en constante actualización. Estos lugares son fragmentos de nuestra memoria, testimonios de nuestras diversas maneras de ser y estar a lo largo de la Historia y a lo ancho del mundo. La creación de este inventario es un compromiso para proteger y conservar estos lugares.
En 1972 se aprobó la Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural en la reunión de la Conferencia General de la UNESCO en París. Desde entonces se ha creado una red de instituciones, entidades y grupos de trabajo para garantizar la aplicación de la Convención, y los acuerdos y principios que defiende. Uno de los instrumentos de protección es la confección de la Lista de Patrimonio Mundial. Su misión es también idear propuestas que favorezcan la conservación de los lugares más emblemáticos, buscar soluciones para sitios patrimoniales que se encuentren en peligro de destrucción, y fomentar acciones que den a conocerlos a todo el mundo. Desde 1972 a 2012 el Comité del Patrimonio Mundial ha publicado varios documentos con nuevas propuestas, estrategias y acciones en torno al patrimonio cultural y natural.
En 2012 celebramos el 40º aniversario de la creación de la Convención del Patrimonio Mundial, con un enfoque especial en el tema “Desarrollo Sostenible y Patrimonio Mundial: el papel de las comunidades locales”.
